Me apetece cambiar el aspecto de las etiquetas de mi marca, "señorita caracol". Hacerlos más ligeros y más textiles. Antes utilizaba transfer y le daba un aspecto plástico. Así que he hecho un sello. Primero se coge el diseño y se pone en el caucho, del revés. Con una buen juego de gubias afiladas, se empieza a tallar.
Cuando el sello está listo, hay que comprobar cómo queda al estamparlo. Aunque la tela tiene más tolerancia al fallo, se notan menos, es mejor probar sobre papel, así nos cercioramos de que el resultado es loo que necesitamos.
Una vez estampado es sello en papel comprobamos cómo queda. Muy chulo, casi no queda nada! Pero hay que perfeccionarlo un poquito. Para mi gusto las letras no están todo lo redonditas que deberían, y el hilo de la aguja es muy grueso.
Yo los retoques los hago con bisturí. Con mucho cuidadito, repaso lo que no me ha gustado.
Ahora pongo tinta y compruebo que está perfecto.
Genial! Podéis ver arriba los fallos que tenía y abajo el modelo corregido.
Una vez terminado lo estampo en tela, con un gatito ayudante que siempre sale todo mejor, y cuando la tinta se ha secado le paso la plancha y la tinta queda fija. Ahora tengo etiquetas más luminosas, más de tela.
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